La junta Directiva del Colegio de Abogados de la Libertad incorporo como miembro honorario de la orden al Dr. Alberto Borea Odria en merito a su producción académica y a su trayectoria en la vida publica peruana. El decano Manuel Montoya Hernández tuvo frases de reconocimiento a la lucha que el líder de Fuerza Democrática realizo durante los años difíciles en los que había que tener coraje y firmeza para defender las libertades publicas y privadas de los ciudadanos de la republica
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Alberto Borea agradeció el gesto e insistió en la necesidad de tener una conducta compatible con los principios democráticos y recomendó a los líderes que todavía titubean de los diversos partidos del sector democrático a que se pronuncien inmediatamente sobre el tema Fujimori para evitar que continúe la confusión que los adláteres del dictador pretenden sembrar en el Perú.
El destino de un delincuente es la cárcel común y por cierto si al cómplice del cabecilla le asignan una cárcel como la base naval del Callao no es otro el destino que le corresponde al cabecilla mismo en este caso a Fujimori Manifestó que no le extrañaba que se hubiera ido a Chile porque él ha pretendido sacar ventaja de la situación de las relaciones internacionales entre nuestros países sin importarle para nada los intereses del Perú.
Es falso, estimo Borea, que Fujimori haya pensado volver en tramos al Perú, en realidad lo que quiso es burlarse de la justicia peruana. Si hubiera querido venir al Perú era muy sencillo tomar un avión y descender en el aeropuerto Jorge Chávez pero se ha venido corriendo por cinco años y ahora pretendió continuar en esa misma actitud.
Alberto Borea remarco la diferencia entre la conducta de una lideresa con clara vocación principista y con clara orientación democrática como es Michelle Bachelet, la que desde el primer instante definió su posición pidiendo la expulsión de Fujimori de Chile y las confusiones y titubeos de Lourdes Flores Nano y Alan García que hasta este momento no han expresado con claridad una posición tajante como se espera de los lideres democráticos.
Borea insistió en la necesidad de continuar solicitando a las autoridades chilenas que en ejercicio de su soberanía procedan en expulsar de ese país a este sujeto que tanto daño le hizo a las libertades de 27 millones de seres humanos y al continente americano en general; al instaurar dentro de nuestro territorio uno de los gobiernos mas corruptos que halla sedado en todo el hemisferio.
Manifestó que no le extrañaba que se hubiera ido a Chile porque él ha pretendido sacar ventaja de la situación de las relaciones internacionales entre nuestros países sin importarle para nada los intereses del Perú Es falso, estimo Borea, que Fujimori haya pensado volver en tramos al Perú, en realidad lo que quiso es burlarse de la justicia peruana. Si hubiera querido venir al Perú era muy sencillo tomar un avión y descender en el aeropuerto Jorge Chávez pero se ha venido corriendo por cinco años y ahora pretendió continuar en esa misma actitud.
Alberto Borea remarco la diferencia entre la conducta de una lideresa con clara vocación principista y con clara orientación democrática como es Michelle Bachelet, la que desde el primer instante definió su posición pidiendo la expulsión de Fujimori de Chile y las confusiones y titubeos de Lourdes Flores Nano y Alan García que hasta este momento no han expresado con claridad una posición tajante como se espera de los lideres democráticos.
Borea insistió en la necesidad de continuar solicitando a las autoridades chilenas que en ejercicio de su soberanía procedan en expulsar de ese país a este sujeto que tanto daño le hizo a las libertades de 27 millones de seres humanos y al continente americano en general; al instaurar dentro de nuestro territorio uno de los gobiernos mas corruptos que halla sedado en todo el hemisferio.
Borea volvió a reiterar su pedido a los medios de comunicación para que dejen de llamar a Fujimori como ex presidente dado que en la guerra semántica el valor de las palabras tiene muchísima importancia y llamarlo como ex presidente es faltar a la verdad histórica y rodearlo de una aureola que no merece quien ha pisoteado las libertades cívicas de una nación.
Borea volvió a reiterar su pedido a los medios de comunicación para que dejen de llamar a Fujimori como ex presidente dado que en la guerra semántica el valor de las palabras tiene muchísima importancia y llamarlo como ex presidente es faltar a la verdad histórica y rodearlo de una aureola que no merece quien ha pisoteado las libertades cívicas de una nación.